.
Vista de Santiago, Chile – Foto: reprodução net
Domingo 28 de febrero de 2010 . Yo era um brasileiro que acabava de despertar en medio al feroz terremoto em Santiago de Chile. Los vasos temblabam, el ruído cada vez mais forte, los kuadros caían. Yo no conseguia quedarme parado. Yo me caía al suelo como un borracho. El suelo parecia que iba a ceder. Yo tuve la sensacion de que me iba a morir. Mis manos temblavam y com las llaves yo pude abrir la puerta de la habitación del hotel. Yo sali de la habitación tironeado de um lado a outro como bola de billar zigzagueando sin rumbo. Yo tuve la paranóia de que un Godzila gigante había llegado a Santiago y nos iba a comer vivos. Yo tuvo miedo de que el Godzila gigante se morfara el edificio entero segundos antes de que yo conseguisse salir a la calle. Yo via que las personas gritavam y lloraban. Yo non gritaba nim lloraba pero mios ojos estabam sucios de pânico y non podia ver nada muy bien kuando encontrei a um señor. Yo y el señor nos dimos las manos como crianzas de 4 años. Yo y el señor después ayudamos a uma señora que gritava por socorro. El ruído era muy alto ahora. Yo estava completamente sordo. Yo tuve ganas brutales de hablar com personas que amo, mi madre, mi hijo, mis hermanos. Yo estaba en la calle en anatómiko em médio a las personas que corriam de um lado a otro kuando me di kuenta de lo que había passado y empezei llorar como uma crianza de 4 años. Una pareja de serbios se acercou y me ofreceu uma jaketa. Yo nom sentia frio nim kalor nim nada pero me cubri com la jaketa y les dije muchas gracias com un abrazo. Ellos me invitaron a su casa y charlamos hasta después del amanecer. Mis nuebos amigos serbios estan muy assustados pero dicen que nada se comparaba a las bombas que la OTAN había lanzado en kontra suo país…
Domingo 28 de febrero de 2010
Yo era um brasileiro que acabava de despertar en medio al feroz terremoto em Santiago de Chile. Los vasos temblabam, el ruído cada vez mais forte, los kuadros caían. Yo no conseguia quedarme parado. Yo me caía al suelo como un borracho. El suelo parecia que iba a ceder. Yo tuve la sensacion de que me iba a morir. Mis manos temblavam y com las llaves yo pude abrir la puerta de la habitación del hotel. Yo sali de la habitación tironeado de um lado a outro como bola de billar zigzagueando sin rumbo. Yo tuve la paranóia de que un Godzila gigante había llegado a Santiago y nos iba a comer vivos. Yo tuvo miedo de que el Godzila gigante se morfara el edificio entero segundos antes de que yo conseguisse salir a la calle. Yo via que las personas gritavam y lloraban. Yo non gritaba nim lloraba pero mios ojos estabam sucios de pânico y non podia ver nada muy bien kuando encontrei a um señor. Yo y el señor nos dimos las manos como crianzas de 4 años. Yo y el señor después ayudamos a uma señora que gritava por socorro. El ruído era muy alto ahora. Yo estava completamente sordo. Yo tuve ganas brutales de hablar com personas que amo, mi madre, mi hijo, mis hermanos. Yo estaba en la calle en anatómiko em médio a las personas que corriam de um lado a otro kuando me di kuenta de lo que había passado y empezei llorar como uma crianza de 4 años. Una pareja de serbios se acercou y me ofreceu uma jaketa. Yo nom sentia frio nim kalor nim nada pero me cubri com la jaketa y les dije muchas gracias com un abrazo. Ellos me invitaron a su casa y charlamos hasta después del amanecer. Mis nuebos amigos serbios estan muy assustados pero dicen que nada se comparaba a las bombas que la OTAN había lanzado en kontra suo país…
Assine as notícias da Guatá e receba atualizações diárias.